Pequeños gestos que marcan la diferencia

Reciclar es una de las acciones más simples y efectivas que podemos hacer para cuidar el planeta. Pero hacerlo correctamente no siempre es tan intuitivo como parece. Una pequeña equivocación como tirar una caja de cartón con restos de comida— puede dificultar todo el proceso.

En Santos Jorge, como expertos en gestión y tratamiento de residuos, sabemos que el cambio empieza en casa o en el trabajo, con decisiones cotidianas. Por eso, te compartimos cinco consejos prácticos para que mejores tus hábitos de reciclaje y aportes tu granito de arena a un mundo más sostenible.

1. Separa los residuos correctamente

Parece obvio, pero sigue siendo uno de los errores más comunes. Cada tipo de residuo tiene su contenedor específico:

  • El contenedor verde es para vidrio (botellas, tarros…), pero nunca con tapones ni otros materiales.

  • El contenedor azul es para papel y cartón, siempre limpios y secos.

  • El contenedor amarillo es para envases de plástico, bricks y latas.

  • El contenedor marrón, si está disponible, es para residuos orgánicos.

Separar bien facilita el reciclaje y evita que los materiales reciclables se contaminen y terminen en el vertedero.

2. Evita contaminar otros materiales

Un solo residuo mal colocado puede arruinar todo un lote de reciclaje. Algunos errores frecuentes son:

  • Tirar papel sucio o con restos de grasa al contenedor azul.

  • Introducir botellas con líquido al contenedor amarillo.

  • Mezclar residuos orgánicos con plásticos.

Recuerda que los materiales deben ir limpios y vacíos. No hace falta lavarlos a fondo, pero sí retirar restos visibles.

3. Reduce antes de reciclar

Reciclar es importante, pero todavía lo es más reducir el consumo y reutilizar todo lo posible. Algunos ejemplos sencillos:

  • Usa bolsas reutilizables en lugar de bolsas de un solo uso.

  • Guarda frascos de vidrio para almacenamiento en casa.

  • Compra productos a granel para evitar envases innecesarios.

Menos residuos, menos problemas. Reducir es el primer paso de cualquier gestión responsable.

4. Usa los puntos limpios para residuos especiales

No todo va al contenedor. Hay residuos que necesitan un tratamiento específico:

  • Pilas y baterías

  • Aceite usado

  • Electrodomésticos

  • Pinturas, barnices, disolventes

  • Muebles y residuos voluminosos

Todos estos deben llevarse a un punto limpio para su correcta gestión. Usarlo bien es esencial para evitar contaminaciones graves y aprovechar materiales recuperables.

5. Infórmate y sensibiliza a tu entorno

El reciclaje no termina en el cubo. Informarte sobre cómo reciclar correctamente te ayuda a actuar con criterio y resolver dudas habituales. Además, si compartes ese conocimiento con tu familia, amistades o en tu lugar de trabajo, el impacto positivo se multiplica.

Puedes seguir a entidades expertas, como Santos Jorge, que ofrecemos recursos y assessoramento para mejorar la atención de gestión de los residuos a escala individual y col·lectiva.